De noche y de día, en la tormenta y en la calma, bajo la lluvia o el sol; eres toda mi vida. No puedo ser si no es contigo. Haría cualquier cosa por ti. Déjame hacer cualquier cosa por ti.
Eres un regalo de Dios, y yo me siento sobrepasado por tanta belleza de tu alma y tu imagen. Sólo quiero amarte por siempre. Quiero aprender a mostrar todos mis sentimientos.
A veces, se me saltan las lágrimas sólo con mirarte o escuchar tu voz. A veces, muchas más, se me escapan sólo de pensar en ti.
Paralizaste mi antigua vida con un ramillete de estrellas, infinitas y radiantes en tu mirada y tu sonrisa, y me hiciste creer en la magia de los sueños, para poder volar.
Eres toda mi Fe, mi ilusión y mi esperanza.
Te necesito más que a todo. Por favor, nunca te marches de mi lado, porque yo me moriría de pena sin ti.
¡Te amo con cada fibra de mi ser!